3 de marzo de 2010

Carlos Ruiz Zafón

En el momento en que leí Marina el nombre de este autor quedó en mi mente, aunque con el tiempo, lo olvidé.  Meses más tarde, cogí por casualidad La sombra del Viento de la biblioteca, y desde ese momento tengo claro que no lo volveré a olvidar.

Tal y como dice la novela hay libros que por alguna causa dejan huella en ti y para mí, La sombra del viento es uno de ellos.  Sencillamente me cautivó desde que empecé a leerlo.

Cuando terminé con él no dudé en comprármelo en cuanto tuve ocasión, y con el tiempo he adquirido otras obras de Ruiz Zafón como El Juego del Ángel, El Príncipe de la Niebla y El Palacio de la Medianoche.

Es cierto que la mayoría de ellos siguen la misma estructura, por así decirlo, y todos se parecen mucho. Sin embargo tienen algo, algo que no sé describir, que hace que cada uno me parezca nuevo y fantástico. A pesar de las malas críticas, a mí personalmente me encanta la forma de escribir de Carlos Ruiz Zafón, hace que me transporte totalmente al lugar que él describe y que me mueva con sus protagonistas. Además, precisamente por ese parecido sé que en sus obras encontraré lo que busco, esos momentos de suspense y tensión, intriga, tristeza y alegría.

Otro detalle que me gusta de sus libros es que siempre encuentro algún personaje que me encanta, del que puedo aprender y reflexionar sobre todo lo que dice, como es Fermín Romero de Torres en la Sombra del Viento.  

En resumen, recomiendo a todos los que hayan leído algún libro de Carlos Ruiz Zafón que se animen con alguno de los mencionados o cualquier otro, y a los que aún no han tenido la suerte de conocer a dicho autor, que no duden en hacerlo.